La fisioterapia para la disfunción sexual es un enfoque terapéutico integral que aborda las causas físicas y emocionales de los problemas sexuales. A través de técnicas específicas, como ejercicios de fortalecimiento y relajación muscular, terapia manual y educación sobre la anatomía y la función sexual, se busca mejorar la sensibilidad, la función muscular y la circulación en las áreas afectadas.